domingo, 8 de marzo de 2009
¿Qué aprendo?
martes, 3 de marzo de 2009
ला प्रेन्सा एस्क्रिता
Los medios de comunicación masivos son transmisores de un determinado tipo de información, la de actualidad. Es necesario enseñar a localizar, sintetizar y reelaborar ese tipo de información dotado de características especiales. El modo y los medios en que se transmite requiere una atención especial.
Características y funciones de los medios.
Los medios de comunicación de masas son canales de comunicación a través de los cuales fluyen mensajes que han sido creados por unos pocos para que los reciban muchos.
Los medios adoptan múltiples formas: periódicos, revistas, libros, tebeos, fotografías, radio, televisión, videocintas, videojuegos, carteles, etc. y cada uno tiene una estructura propia y una manera de intervenir en la realidad.
Ya a mediados de los 70 se estimaba que los niños entre cinco y catorce años dedicaban un 44 por 100 más de su tiempo a ver la televisión que a aprender en la escuela. El británico adulto medio dedica 75 horas semanales de media a la televisión, radio, periódicos y revistas. Esta cifra indica la saturación a la que estamos sometidos cuando tenemos puesta la tele o la radio, mientras desarrollamos una tarea en el hogar o en el trabajo, etc. Pero no es sólo el tiempo que dedicamos a los medios lo que los hace significativos; los medios son importantes moldeadores de nuestras percepciones e ideas, de maneras de ver y entender el mundo.
Una gran variedad de funciones de los medios afecta nuestra vida diaria. Los medios de comunicación juegan un papel diferente para los individuos y la sociedad en su conjunto. Los mensajes suelen verse afectados por la forma de los medios. Algunos mensajes tienen un impacto inmediato, mientras que otros traen consecuencias de largo alcance. Estas consecuencias pueden ser previsibles o inesperadas. Actualmente se distingue entre funciones sociales de los medios y funciones para el individuo.
Funciones para la sociedad
Lasswell, dice que los medios cumplen tres funciones para la sociedad como un todo: vigilancia, correlación y transmisores de la herencia social.
ü Vigilancia del medio. Es la más obvia. Se refiere al servicio periodístico de los medios: recoger y diseminar información. Los medios cumplen un papel de “centinelas” o vigilancia que se concretan en:
Detectar peligros y formular advertencias
Vigilancia doméstica, suministrando información útil, sencilla que ayude a resolver los problemas de la vida diaria.
Contribuyen a la creación de una sociedad democrática informando al ciudadano sobre asuntos políticos y gubernamentales.
ü Correlación de las partes. Los medios ofrecen explicaciones e interpretaciones de los hechos noticiosos con el fin de ayudar a comprenderlos. La noticia escueta proporciona información, la interpretación o correlación va más allá, intentando favorecer el conocimiento. Lo llevan a cabo los editorialistas y columnistas de los periódicos, o los comentaristas de radio y televisión a través de reportajes. Igualmente se realiza mediante el contacto telefónico de programas de radio y las cartas de los lectores que aportan espacios para que se expongan distintos puntos de vista. Los humoristas o caricaturistas gráficos presentan a menudo visiones mordaces sobre temas actuales (recuérdense las viñetas de los humoristas españoles Forges, Mingote, Máximo, etc.). La propia selección de las noticias, por razones de espacio, es una especie de interpretación.
ü Transmisión de la herencia social. Es básicamente de carácter educativo, significa el paso de la herencia social y cultural de una generación a otra. Los medios transmiten información sobre la sociedad misma, su historia, normas y valores, suministrando directrices culturales. Junto a los padres, la escuela y la iglesia, los medios de comunicación sirven para aprender.
Los propios profesionales del periodismo, opinan sobre las funciones de los medios y expresan con términos más sencillos las siguientes funciones de carácter social:
ü Información. Muy poco de lo que aparece en los medios de comunicación deja de informarnos de alguna manera.
ü Diversión. La función de diversión también es básica. Hoy existe más tiempo libre que se utiliza con diversas formas de diversión. Los principales programas de televisión que los índices de audiencia señalan como los más vistos son de entretenimiento. La televisión es hoy en día la fuente principal de diversión masiva, pero la función de diversión también la tienen otros medios. La radio nos brinda música para todos los gustos. Las películas, los libros y las revistas de narrativa corta nos brindan comedia, tragedia, sexo y acción para divertirnos. Hasta los periódicos nos ofrecen diversión en la forma de artículos de interés humano, crucigramas, historietas cómicas y horóscopos.
ü Persuasión. Los medios se usan para formar la opinión pública, influir en los votantes, cambiar actitudes, moderar la conducta, derrumbar mitos y vender productos. La función de persuasión es más efectiva cuando se hace sutilmente, ya que a nadie le gusta la manipulación.
ü Servir al sistema económico. En las sociedades capitalistas, los medios están involucrados en el servicio al sistema económico, incluso a la economía de los medios mismos, puesto que la mayoría de ellos existe para obtener ganancias. Lo hacen a través de la información sobre negocios, por medio de la cobertura informativa que dan a las tendencias económicas, de informar sobre los impuestos y sobre los productos. El servicio económico más obvio es la función publicitaria, porque acercan entre sí a vendedores y compradores.
ü Transmisión de la cultura. Es el resultado de las otras funciones. Los individuos asimilan la información y aprender con ella, aumentan sus conocimientos, cambian valores y su experiencia total. Los mensajes de los medios pueden llevar a la homogeneización de la sociedad.
Funciones en relación con el individuo
Los investigadores opinan que los miembros individuales del público buscan los medios de comunicación por una variedad de razones: para el mejoramiento personal, el esparcimiento, el descanso, el intercambio social y hasta para tener un lugar donde esconderse.
ü La función de cognición. Se refiere al proceso de aprendizaje. Las personas a menudo se dirigen a los medios para mejorarse a sí mismas. Pongamos como ejemplo el poderoso medio televisión. Hoy día los niños crecen con “la tele”. La televisión es el narrador de historias básico en sus vidas. Aprenden el funcionamiento del mundo por medio de la televisión. Descubren a través de ella el sexo y la agresividad. Desarrollan hábitos de consumo sobre la base de lo que se anuncia en la televisión.
ü Diversión-juego. Con la excepción de las personas obsesionadas con el trabajo, la mayor parte de la gente desea un poco de descanso y esparcimiento para repartir equitativamente el día. Hasta cuando estamos buscando conocimiento, queremos que sea divertido. Contra el aburrimiento buscamos en los medios emociones. Contra la sobreexcitación, historias tranquilizantes, música suave; contra el nerviosismo por otro día de trabajo, buscamos tranquilidad emocional, películas de terror para descargar nuestros temores.
ü Utilidad social-transmisión en cadena. Los medios también favorecen nuestra interacción social con la familia, los amigos y los conocidos. Aprendemos la conducta que es aceptable socialmente, nos mantenemos al día sobre la moda. Todo ello como parte de lo que la propaganda llama instinto de rebaño, la necesidad que tienen los individuos de pertenecer a la mayoría, de ser parte de la corriente principal. Los medios nos ayudan a encajar, a tener algo de qué hablar en una conversación.
ü El aislamiento. Por el contrario, los medios también nos permiten apartarnos de la sociedad. La gente se cansa de estar en el centro del escenario a todas horas, de sonreir y comportarse como damas y caballeros todo el tiempo. Algunas veces usamos los medios para no enfrentarnos a aquellas actividades que no nos gustan.
Durante hace algún tiempo cundió la opinión de que los medios de comunicación eran importantísimos en la gente y la cambiaban. Esta “teoría de bala” (conocida como “teoría hipodérmica”) de la comunicación de masas concedía a los medios un papel decisorio e influyente, mientras que las personas eran pasivas ante sus mensajes y, como tal, de fácil adoctrinamiento. Investigaciones posteriores revelaron que la audiencia era, en gran parte, mucho más activa de lo que se pensaba al recibir los datos a través de los medios de comunicación y, a la hora, de procesar la información era importante el grado de convicción personal, madurez, opiniones propias y la de otras personas de su mismo entorno social.
ला RELACIÓN ENTRE MEDIOS DE COMUNICACIÓN Y LA ESCUELA
La educación debería contribuir a formar a los ciudadanos en la actualidad y en la construcción del conocimiento social, cultural, político (Gonnet, 1995). La tarea del ciudadano no consiste en delegar su poder, sino en ejercerlo y en desarrollarlo. La educación audiovisual es un instrumento que profesores y alumnos poseen para empezar a desafiar la gran desigualdad de conocimiento y poder que existe entre los que fabrican la información. Por lo tanto, la educación en materia de comunicación sería una educación para usar las informaciones de los medios y comprender qué está pasando en la actualidad.
Integrar los medios de comunicación
La necesidad del estudio de los medios de comunicación masivos en los niveles educativos ha sido contemplada en la propuesta curricular del MEC y viene dada por responder a cómo éstos están presentes, a nivel social y cultural, en la vida misma y cómo nos presentan diariamente lo que ocurre en nuestro entorno.
El conocimiento de la realidad, la construcción de lo que ocurre y el valor de las cosas pasa por el tratamiento que los mass-media dan a los hechos, a las personas, a los acontecimientos. Se hace prioritario descubrir cómo los medios de comunicación construyen y presentan la información, su manera de decir lo que pasa y cómo insisten en determinados aspectos de la vida.
Desde los setenta han existido un conjunto de trabajos coincidentes en realizar un planteamiento general de aproximación a la cultura audiovisual, cargando las tintas en lo que se llama la pedagogía de los medios. Desde entonces se pueden distinguir dos fases en el proceso de aproximación entre escuela y medios de comunicación:
1ª) Reconocimiento de las virtualidades y ventajas (algunos dicen también prodigios) que podría acarrear el uso de los medios de comunicación en los centros. Dificultad de hallar coordenadas didácticas y organizativas.
2ª) Aportaciones que indican cómo integrar el tratamiento de los medios de comunicación en el currículum, cómo organizar un conjunto de objetivos y contenidos para la educación en los medios, que llevara al alumnado a conocer los medios y a saber qué producen, cómo lo hacen y con qué sentido se puede montar un conjunto de actividades basada en un mayor conocimiento de los medios. Enseñanza en, con y para los medios de comunicación.
La idea de avanzar en lo básico, en el conocimiento de aquello que los alumnos van a necesitar como ciudadanos del siglo XXI es lo que define cualquier intento de organizar las propuestas didácticas para la educación desde infantil y primaria hasta el nivel adulto. La urgencia de esta formación en la actualidad nos llevaría a darle sentido mediante el diseño de estrategias de uso escolar que garantizaran la finalidad de conseguir que los alumnos aprendan a discriminar los productos audiovisuales y al análisis valorativo de los mensajes que vehiculan.
Los medios de comunicación en el aula: la prensa
El uso de los medios de comunicación en la escuela se ha centrado exclusivamente en la prensa, desde el punto de vista de la utilización instrumental del diario como material de clase, especialmente como recurso a los contenidos de lengua y ciencias sociales.
Entre los beneficios que aporta destacamos:
· La conexión de la enseñanza con la realidad
· Las posibilidades de servirse de los problemas cotidianos
· Acercar al alumno y familiarizarse con los medios de comunicación de masas para integrarlos en la educación.
Además se desarrollan los hábitos fundamentales para la educación:
· Curiosidad
· Motivación para saber de lo nuevo
· Seleccionar y decidir qué cuestiones son de interés
· Participación en actividades grupales
· Preocupación por grandes temas
· Lectura rápida
· Interpretación lectora
CONOCER LA PRENSA
Características de la prensa
La prensa electrónica
Características de la prensa electrónica
Formato digital o electrónico
Fácil acceso
Documentación
Contenidos
La lectura como “navegación”
La actualización contínua
El diseño
Hipermedia
Lectores
Publicidad
Análisis del periódico
CÓMO ENSEÑAR DESDE LA PRENSA
Esporádica, ocasional
Traer artículos del periódico que se reciben en casa y se comentan en clase.
Taller de prensa
Utilización del periódico con profundidad en varias semanas.
Integración curricular
Integrar los contenidos que aparecen en la prensa y en otros medios, en el desarrollo normal de contenidos curriculares
Funciones de la prensa como recurso
Informativa
La prensa informa, no es un libro de texto complementario, un libro de lectura.
Compensadora
Contraste de la las informaciones provenientes de la realidad y el conocimiento abstracto.
Apertura al medio
Medio de abrir la escuela a la “vida”. La prensa ofrece material suficiente para investigación y descubrimiento de nuevos contenidos
Complementaria
La prensa en primaria siempre ayuda al profesor para completar sus actividades ordinarias en técnicas instrumentales de lenguaje, conocimiento del medio natural y social y matemáticas.
Dificultades en la prensa como recurso didáctico
Por la finalidad del medio
Por sí la prensa no tiene como intención una consideración educativa o formativa
Falta de sistematización
Dificultad más importante: la fragmentación y el dar por supuesto que el lector cuenta ya con una información y un conocimiento previo (información económica, política y cultural)
Tipo de contenido
La inmediatez o servidumbre a los temas actuales y la manipulación posible de la realidad provoca que no siempre el medio difunda la realidad en su integridad
Propuestas de trabajo (introducir la prensa en el curriculum, no en el aula)
Integrarla en un proyecto educativo coherente:
· Cómo vamos a enseñar mejor
· Con qué criterios vamos a seleccionar las fuentes de información
· Hacia dónde vamos a dirigirnos para que el alumno sepa más y mejor sobre lo que ocurre
El trabajo con los medios de comunicación en el aula posibilita:
· Leer la actualidad
· Trabajar determinados contenidos de las áreas curriculares
· Trabajar temas amplios interdisciplinares
· Producir informaciones y elaborar noticias, mediante diferentes recursos (periódico escolar, revista, radio escolar, etc.)
La prensa puede ser un buen elemento para desarrollar hábitos fundamentales:
· Saber pensar
· Distinguir hechos de opiniones
· Saber mencionar
· Aprender a buscar información
· Juzgar, analizar, comparar y sintetizar, transformar una información
· Elaborar nuevos mensajes
· Determinar la tendenciosidad
· Aumentar la capacidad de comprensión, la velocidad lectora
· Interpelación e integrar información en unas estructuras mentales propias
· Si el Proyecto Curricular de Centro desarrolla positivamente la formación de los alumnos en, de y sobre los medios de comunicación procurará proporcionar a sus alumnos unos conceptos básicos que permitan a los propios alumnos seleccionar, valorar e integrar la información recibida, revisar las actitudes antes los mensajes y en definitiva, potenciar los dos subsistemas de información y formación.
Áreas curriculares
El uso de los medios debe darse progresivamente desde el segundo ciclo de Educación Infantil, pasando por Primaria, Secundaria Obligatoria y Bachillerato.
Lenguaje
· Promueve hábitos de escucha
· Mejora la comunicación oral
· Adquisición de técnicas para escribir sobre temas objetivos
· Enriquece experiencias de lectura
Primer ciclo de Primaria:
· Desarrollar en el niño la comprensión lectora y manifestar su opinión, de forma oral
Segundo ciclo de Primaria
· Comprensión de textos
· Comprensión de técnicas de redacción
· Analizar y sintetizar temas leídos en la prensa
· Técnicas de trabajo que desarrollen lectura crítica
Tercer ciclo de Primaria y Secundaria Obligatoria
· Identificar puntos clave de un artículo
· Seleccionar distintas informaciones para analizar contenidos que tengan titulares para identificar los puntos clave de un artículo
· Investigar acerca de lo que quitaría o añadiría en el titular.
· Actividades para mejorar la gramática, ortografía.
Sociales
Conocimiento de los acontecimientos sociales, políticos mediante la comprensión y discusión en clase.
El periódico:
· Ayuda a la recogida de información sobre un tema
· Aumenta el grado de comprensión de los acontecimientos actuales
· Ayuda a reconocer la relación del pasado con el presente
· Desarrolla la cualidad de tener una mente abierta y un pensamiento crítico
Matemáticas
Poco habitual, pero se están desarrollando experiencias.
Los fenómenos o hechos sociales y naturales presentes en la prensa, incluyen datos cuantitativos, establecen relaciones lógicas o se organizan espacialmente.
Las posibilidades de la Prensa se resumen en:
· Enriquecen significados matemáticos
· La comprensión de problemas matemáticos con realidades de la vida
· Informa del desarrollo científico
· La comprensión de gráficos y datos expuestos en tablas
ACTIVIDADES PARA TRABAJAR CON LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN (Ballesta, 1998)
De familiarización
con los medios
como fuentes de
información
1. Identifica el medio de comunicación: ideología, trayectoria y repercusión social
2. Busca y selecciona informaciones provenientes de diferentes medios de comunicación: análisis del contenido transmitido
3. Compara las portadas de un periódico del mismo día de tirada nacional y haz un análisis de qué dice, cómo lo dice, qué omite, como se posiciona. Analiza la combinación de texto escrito e imagen
4. Enumera, busca y selecciona los posibles temas que son noticia en los medios de comunicación durante una semana, estableciendo comparaciones, seguimiento y evaluación sobre cómo afecta éste en el desarrollo de otros temas
5. Busca informaciones en titulares y haz un análisis del contenido que transmite
6. Analiza el tratamiento de la imagen y sus funciones en diarios, anuncios publicitarios, spots televisivos
7. Identifica y analiza como un hecho puede diferir de un medio a otro, según el tratamiento ofrecido: entrevista, reportaje, noticia breve, debate, salida en titular, resumida en el informativo de máxima audiencia
Sobre qué y cómo se representa la información
1. Analiza qué elementos constituyen la base conceptual de la información: ¿Qué dice y cómo lo dice?
2. Comprueba en diferentes medios si el contenido de una información tiene una base documental y si la cita, o por el contrario la ignora
3. Selecciona temas publicados en los medios que están relacionados con la educación y establece un análisis de contenido.
4. Valora el tratamiento que un medio hace en relación a determinados conocimientos, saberes, temas (salud, educación, economía, etc.). Justificar este tipo de contenido y relacionarlo con otras cuestiones: línea del grupo editorial, pertenencia a grupos empresariales, otros.
5. Haz una clasificación sobre la información en los medios y establece relaciones para configurar una clasificación de los medios en los contenidos que desarrolla (si son documentados, oficialistas, oportunistas, etc.) e intenta justificarlo.
6. Analiza cómo los medios de comunicación favorecen determinados temas, destacan o ignoran a determinadas personas, grupos, etnias; discriminan o favorecen planteamientos integradores y sociales, sirven a intereses económicos determinados y a opciones políticas concretas.
Sobre el diseño de materiales para la Educación en la Comunicación
1. Diseña materiales mediáticos diversos: radiofónicos, audiovisuales, escritos, etc.
2. Planifica productos mediáticos: spots, videoclips, cómics, carteles publicitarios.
3. Prepara presentaciones sobre temas preestablecidos relacionados con los medios de comunicación.
4. Diseña propuestas para explorar y diagnosticar las experiencias previas, los intereses y creencias de alumnos hacia los medios de comunicación.
5. Desarrolla tareas y actividades de análisis de los medios en relación al tema o problema seleccionado.
6. Diseña Unidades didácticas para diferentes niveles educativos en esta temáticas.
Gráficos (Ballesta, 1998)
Conocimiento del medio de comunicación prensa
Cómo se dice la información en prensa
Propuestas para conocer la prensa
Bibliografía
Ballesta, J. ; Guardiola, P. Escuela, familia y medios de comunicación. CCS, 2001
Ballesta, J. ; Sancho, J. ; Área, M. Los medios de comunicación en el currículum. KR, 1998
Ballesta, J. (coord.) Los medios de comunicación en la sociedad actual. Universidad de Murcia, 2000
Ballesta, J. Medios de comunicación y nuevas tecnologías. DM, 1997
MERRILL, J. C. ; LEE, J., FRIEDLANDER, E.J. Medios de comunicación social: teoría y práctica en Estados Unidos y en el mundo. Fundación Germán Sánchez Ruipérez, 1992
http://www.um.es/gtiweb/jgomez/hei/intranet/heimedios2002.doc
¿Para qué educar?
Leonardo Garnier Rímolo
Ministro de Educación Pública
¿Para qué educamos? La respuesta más simple y probablemente la más completa es que educamos para la vida o, lo que es lo mismo, educamos para la convivencia. Educamos – como diría Touraine – para que podamos vivir juntos en este planeta y para tener, juntos, una vida plena.
Esto quiere decir que educamos para hacernos capaces de asumir nuestras paradojas fundamentales: una, la de ser animales individuales y mortales… y tener conciencia de ello. Dos, la de tener también conciencia de que solo trascendemos y superamos esa vida y muerte individual, gracias a la curiosa característica de ser animales sociales: nuestra existencia solo tiene sentido mediante nuestra relación con los otros, que es la que, finalmente define nuestra compleja identidad.
Vivir y convivir tiene muchas aristas: en nuestra relación con los otros nos va la vida; ya sea que hablemos del amor o de la guerra; del trabajo o del juego; de las pasiones o los intereses, del ocio o del negocio. Para todo eso, educamos… y para eso, debemos educar a todos.
Nuestra relación con los otros es inevitablemente paradójica y está maravillosamente recogida en las dos grandes obras de aquel profesor de filosofía moral que terminó convertido en padre de la economía moderna: el ser humano vive en una constante tensión entre el egoísmo y la simpatía; entre el intento por aprovechar la necesidad ajena en su propio beneficio y la capacidad de sufrir con el dolor y gozar con el bienestar del prójimo.
No esperamos el pan de la bondad del panadero ni la cerveza de la del cervecero sino de la necesidad que tienen de satisfacer su propio interés – nos decía Adam Smith en La Riqueza de las Naciones –. De ahí el comercio, el intercambio y el trabajo en su sentido social: trabajamos para los demás e intercambiamos el fruto de nuestro trabajo con ellos… esperando, sin ingenuidad, que ellos trabajen también para nosotros.
Por eso la educación debe ser, en parte, una educación para el trabajo, para la producción y el intercambio, para la convivencia económica con los demás, una convivencia que nos permita sacar partido – individual y colectivo – a lo que bien podríamos llamar la eficiencia del egoísmo.
Pero así como nos importan los demás desde este ángulo utilitarista, nos importan también en un sentido mucho más complejo y profundo, que el mismo Smith desarrolla en su Teoría de los Sentimientos Morales: más que ninguna otra cosa – dice – nos interesa el afecto o la simpatía de los demás: su aprecio, su respeto, su reconocimiento; en fin, nos importa qué piensan y sienten los demás sobre nosotros. Nos importa importarle a los demás.
De aquí fluye esa contradicción inevitable que marca nuestras vidas: vivimos entre el egoísmo y la simpatía. Buscamos poder, prestigio y riqueza, pues creemos que nos brindan todo aquello que tanto anhelamos. Pero al mismo tiempo, buscamos el afecto, el respeto, la solidaridad y el reconocimiento de los demás pues solo ese reconocimiento da sentido trascendente a nuestra vida.
Para eso debemos educar: tanto para la convivencia eficiente, útil y práctica del mundo del trabajo, del comercio o del consumo; como para la vida plena y trascendente que surge de la convivencia solidaria y del afecto desinteresado. Esta no es una paradoja simple… mucho menos una paradoja fácil de traducir en recetas educativas.
Queremos que los estudiantes aprendan lo que es relevante y que lo aprendan bien: que nuestros jóvenes adquieran y desarrollen el conocimiento, la sensibilidad y las competencias científicas; lógicas y matemáticas; históricas y sociales; de comunicación y lenguaje.
Todo esto es clave… pero no basta.
En un mundo incierto en el que pareciera a veces que todo se vale y en el que se vuelve casi indistinguible lo que vale más… de lo que vale menos; en un mundo en el que prevalece el miedo, la pregunta de ¿para qué educar? adquiere un significado adicional y angustiante.
Al educar para la vida y la convivencia no podemos quedarnos con las necesidades prácticas del egoísmo: necesitamos la simpatía que Smith encuentra como condición necesaria para la supervivencia sostenible de una sociedad libre que convive en un planeta frágil. No podemos quedarnos con el economista: necesitamos al filósofo.
Por eso, a la educación que prepara para la búsqueda pragmática de ‘lo verdadero’ debe agregarse la educación que forma para la búsqueda trascendente de ‘lo bueno’ y ‘lo bello’: una educación en la ética y la estética, como criterios fundamentales – y nunca acabados – de la convivencia humana. Una educación para la ciudadanía, una educación que nos libre de la discriminación y el miedo.
Por eso debemos educar en la ética y la ciudadanía. Nuestros jóvenes no pueden crecer sin criterios éticos en un mundo en el que se diluye la obligación moral de buscar y luchar por aquello que es humanamente correcto o bueno. No podemos educar ni en los valores inmutables de los conservadores ni en la cómoda ambigüedad de los relativistas, sino en la búsqueda de qué es lo que nos permite vivir juntos, con respeto, con simpatía, con solidaridad, con afecto, reconociéndonos y aceptándonos en nuestra diversidad. Para eso, educamos.
De la misma forma, debemos educar para que nuestros jóvenes aprendan a gozar de la belleza natural y artística, que sean capaces de apreciarla y valorarla; que puedan entenderla – conocer y respetar sus raíces y experimentar sus derivaciones y combinaciones – y que sean capaces de comunicarse y expresarse, ellos mismos, artísticamente.
Educamos para la cultura, para los derechos humanos y para eso que hemos llamado un ‘desarrollo sostenible’. Educamos para todo eso que constituye esa parte de nuestra naturaleza humana que no viene inscrita en el código genético, sino en nuestra historia. Educamos para que prevalezca la razón y no se repitan los errores del pasado: educamos contra la magia y la tiranía. Educamos para el ejercicio crítico pero sensato de la ciudadanía democrática. Educamos para cerrar esas brechas que nos separan. Educamos, en fin, para vivir en el afecto y la memoria de los demás: solo así trascendemos como individuos; solo así sobrevivimos como especie.
Es por todo ello que la alfabetización del siglo XXI significa algo más que leer, escribir y entender la aritmética básica; significa poder entender y expresarse en los símbolos de nuestro tiempo, y esos son los símbolos de la ciencia, de la tecnología, de la política, del arte y cultura a todo nivel. No podemos aspirar a menos.
Termino con un comentario más práctico sobre esta reflexión un tanto abstracta. Educar para la búsqueda de ‘lo verdadero’ no es solamente un esfuerzo académico, sino que es indispensable para poder vivir realmente una vida plena: los estudiantes deben entender que la ecuación de la parábola que estudian en matemática es, precisamente, la que permite a David Beckham anotar sus goles de tiro libre; que la fórmula NaCl es la que da el sabor saladito a su comida y que tras alguna de las tantas guerras que estudiaron está alguno de sus abuelos. De la misma forma, educar en la búsqueda de ‘lo bueno’ y ‘lo bello’ no tiene solamente un sentido sublime y lejano, sino completamente práctico… y esto lo entienden bien los jóvenes artistas – raperos, bailarines, poetas, cantantes, pintores, cineastas – que expresan en su arte las angustias de ser joven en nuestro mundo y encuentran en ello su identidad y su razón de permanecer o escapar de los colegios.
En español, la diferencia entre aula y jaula es solo una letra… cuanto más parezcan jaulas nuestras aulas, mientras más prevalezca el miedo como estrategia educativa… menos jóvenes tendremos en ellas, menos educación. Cuanto más arte, más convivencia, más respeto haya en los colegios, más jóvenes se sentirán a gusto en ellos; habrá menos deserción y más educación para la vida, para el trabajo y para la convivencia ciudadana. Para eso educamos… y el reto es enorme: es un reto que empieza por reeducarnos nosotros mismos y reeducar a los educadores.
http://www.mep.go.cr/carta_ministro/para_que_educamos.html